Vas a entrar a un texto que posee sabiduría ecuestre y ofrece recursos útiles para mejorar tu interrelación con estos seres.El panorama de tu sabiduría ecuestre se extiende – te motivamos a profundizar en otro nivel de comprensión con nuestro artículo que se centra en doma sin violencia, revolucionando tu manera de ver a estos seres extraordinarios. Hazte tu lugar acogedor, ármate para el aprendizaje y, ¡por supuesto, degusta toda línea y brinco en el sendero del conocimiento ecuestre!
Hola jinetes, en este artículo os traemos una sesión de monta en la que vamos a trabajar diferentes aspectos de la doma clásica. En esta ocasión, vamos a enfocarnos en la reunión del galope y en los apoyos laterales.
Antes de comenzar, es importante resaltar que estas sesiones están dirigidas a caballos que ya tienen un nivel avanzado en la doma clásica. Si aún estás trabajando en los apoyos enteros o en otros ejercicios de doma básica, te recomendamos que consultes otros artículos de nuestra página web donde podrás encontrar tutoriales y consejos para mejorar en estos aspectos.
Calentamiento y preparación
Como siempre, empezamos la sesión con un buen calentamiento. Caminamos durante unos 15 minutos por fuera del cuadrilátero para que el caballo se vaya activando y calentando los músculos. Hemos notado que este tiempo de calentamiento previo es fundamental para que el caballo se muestre más receptivo al trabajo y se ponga bien mucho más rápido.
Dentro de esos 15 minutos de paso, también incluimos las sesiones a la pierna, donde trabajamos la flexibilidad y la obediencia del caballo a través de diversos ejercicios. Esto nos ayuda a preparar al caballo y a que se vaya doblando correctamente.
Trabajo en el galope
Una vez que el caballo está bien calentado, empezamos a trotar. Buscamos que el caballo vaya activo y que se vaya despertando en el trote. Realizamos círculos a cada mano para trabajar la flexibilidad y los pliegues.
Después de un buen tiempo de trote, empezamos a trabajar en el galope. El objetivo es que el caballo vaya bien en la actividad y se muestre en suspensión. Durante esta fase, trabajamos la reunión del galope, es decir, buscamos que el caballo se junte y se mueva de forma más compacta.
Realizamos diversos ejercicios en el galope, como arropadas hacia delante, en las cuales el caballo se muestra con un galope grande y en suspensión. Además, también trabajamos las transiciones entre el paso y el galope, buscando que el caballo responda de forma rápida y precisa.
Trabajo en el trote
Después de trabajar en el galope, nos centramos en el trote. Aquí realizamos ejercicios de trabajo lateral, como las grupas adentro y las espaldas adentro. Estos ejercicios nos ayudan a mejorar los apoyos, la flexibilidad y la coordinación del caballo.
También trabajamos en la flexión y el apoyo, realizando ejercicios que mezclan ambas técnicas. Estos ejercicios son clave para preparar al caballo para los cambios de pie y para mejorar la reunión. Es importante destacar que estos ejercicios se realizan en círculos, ya que esto facilita el trabajo para el caballo.
Por último, dedicamos un tiempo al estiramiento del caballo. Le dejamos trotar con las riendas largas para que se estire y se relaje después del trabajo intenso. Esto nos permite bajar las revoluciones y ayudar al caballo a recuperarse.
Estas son las pautas que seguimos en nuestras sesiones de doma clásica. Es importante recordar que cada caballo es único, por lo que es fundamental adaptar los ejercicios según las necesidades y las capacidades de cada uno.
Si te interesa aprender más sobre la doma clásica, te invitamos a explorar otros artículos de nuestra página web. Allí encontrarás tutoriales y consejos que te ayudarán a mejorar tus habilidades como jinete y a mantener al día sobre el mundo de los caballos.
Esperamos que este artículo te haya resultado útil y que puedas aplicar estos consejos en tus futuras sesiones de doma clásica. ¡Nos vemos en el próximo artículo!