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En este artículo vamos a explorar la parte menos conocida y a menudo subestimada del entrenamiento de caballos: lo que no debemos enseñarles. Es común que nos centremos en cómo enseñar a nuestros caballos las cosas que queremos que hagan, pero es igualmente importante asegurarnos de que no les enseñemos involuntariamente comportamientos no deseados. En este video, descubriremos algunas prácticas que nunca debemos hacer con nuestros caballos. ¡Comencemos!
Uno de los problemas más comunes es enseñarles a nuestros caballos a no quedarse quietos para que se trabajen sus cascos. A menudo, pensamos que sería más fácil dejar que el herrador se haga cargo de esto, pero en realidad estamos enseñando a nuestros caballos a moverse constantemente. Para evitar este problema, es importante tomarse el tiempo necesario para enseñarles a quedarse quietos y premiarlos cuando lo hagan correctamente.
Otro error común es no ser consistentes en nuestras señales de comando. Si les permitimos a nuestros caballos que ignoren nuestras indicaciones, estamos enseñándoles que no es necesario escucharnos. Esto puede llevar a problemas de seguridad, especialmente cuando necesitamos que nuestro caballo se comporte adecuadamente en situaciones como cargarlo en un remolque. Es fundamental establecer límites claros y asegurarnos de que nuestros caballos los respeten.
Un error que puede tener consecuencias peligrosas es dejar a nuestro caballo atado mientras intentamos controlar situaciones estresantes, como abrir un separador en un remolque. Si nuestro caballo está ansioso y atado, es probable que intente escaparse y ponerse en peligro. Es importante encontrar formas seguras de manejar estas situaciones, como entrenar a nuestro caballo para que se sienta cómodo con el separador antes de intentar abrirlo.
Un problema muy común es montar a caballo que nunca se queda quieto para ser montado. A menudo, estamos ocupados y no queremos perder tiempo tratando de calmar a nuestro caballo excitado, por lo que simplemente nos subimos y seguimos adelante. Sin embargo, esto refuerza el comportamiento no deseado y puede llevar a situaciones peligrosas. Tomarse el tiempo para enseñar a nuestro caballo a quedarse quieto antes de montar puede evitar futuros problemas.
En ocasiones, nuestro caballo puede desarrollar el hábito de quitarnos las riendas de las manos al caminar. Esto puede resultar irritante y peligroso. En lugar de permitir que esto suceda, es importante corregir de inmediato este comportamiento y enseñar a nuestro caballo a respetar nuestras riendas y nuestras señales de comando.
Otro comportamiento no deseado es cuando nuestro caballo se niega a avanzar y solo quiere comer pasto. Esto puede ser frustrante, especialmente si estamos tratando de avanzar en nuestro entrenamiento o si estamos en una situación que requiere que avancemos. En lugar de luchar constantemente contra nuestro caballo, debemos enseñarle a respetar nuestras indicaciones y a no distraerse con la comida. Esto puede requerir paciencia y consistencia, pero a largo plazo valdrá la pena.
Espero que hayas disfrutado este artículo y que hayas aprendido algo nuevo sobre lo que no debes enseñar a tu caballo. En los próximos artículos, continuaremos explorando diferentes aspectos del entrenamiento equino y te brindaremos consejos prácticos sobre qué enseñar y qué evitar. No olvides suscribirte a nuestra página web y seguirnos en las redes sociales para estar al día con las últimas noticias sobre el maravilloso mundo de los caballos. ¡Nos vemos en el próximo artículo!