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Los caballos Árabe Saya son una raza equina desarrollada en el imperio austrohúngaro durante el siglo XIX. Estos caballos se crearon utilizando como base el caballo de pura sangre árabe y se les añadió sangre de yeguas transilvanas. Hoy en día, se pueden encontrar en Europa y Norteamérica.
El Árabe Saya de raza pura tiene linajes que se pueden rastrear en todos los libros genealógicos de Raw Dati, Bábolna y Topos Yanqui. Algunos consideran que esta raza debería ser catalogada como un subtipo o línea de caballos de pura sangre árabe debido a su gran parecido. Sin embargo, debido a la presencia de una pequeña cantidad de sangre no árabe en su ADN, otros los consideran como un anglo-árabe o un árabe mestizo.
Uno de los sementales fundadores más importantes de esta raza fue Esa Ya, un caballo de media sangre árabe de color tornillo. Este semental, nacido en Siria en 1810, era más alto que un árabe promedio de la época, con 1.59 metros a la cruz y un peso de 530 kilogramos.
Originalmente, estos caballos con gran cantidad de sangre árabe, pero no completamente puros, fueron identificados como árabes de raza. Sin embargo, después de la Segunda Guerra Mundial, se les comenzó a llamar Árabe Saya, debido a la presencia del semental Esa Ya en todos los pedigrís de estos caballos.
La cría de los caballos Árabe Saya se inició en la yeguada de Valbona, fundada por el comandante Josep Seco Knézich y situada cerca de la frontera con Austria y Eslovaquia. En esta yeguada, se cruzaron los primeros caballos árabes de Saya con yeguas provenientes de Transilvania, que eran descendientes de los tarpanes. Estas yeguas eran famosas por su velocidad, resistencia y coraje.
Aunque estos caballos no se consideran árabes puros, tienen un libro genealógico cerrado y un estatus especial dentro de la Organización Mundial del Caballo Árabe (UAW). En 1978, la UAW declaró que los Árabe Saya criados bajo el sistema cerrado de Bábolna Light o porcentaje igual o mayor al cien, pueden denominarse Árabe Saya de raza pura. La organización de criadores de Saya está bajo el patrocinio de la UAW como miembros asociados autorizados a utilizar el emblema.
El Árabe Saya exhibe rasgos similares al del caballo árabe de pura raza, como una cola alta, huesos sanos y muy buena resistencia. Sin embargo, debido a la influencia de sangre no árabe y los objetivos de cría de los sementales húngaros, los Saya tienden a ser más altos, menos refinados y de huesos más grandes que los árabes.
Esta raza es reconocida como un caballo de montar y también de arnés. En sus inicios, era utilizado como caballo de caballería resistente y ahora es popular en disciplinas deportivas como la doma, la competición y la equitación de resistencia.
El Árabe Saya ha heredado la belleza y elegancia de movimientos de sus antepasados árabes. Es un caballo robusto, musculoso y con un cuello perfectamente acoplado al tronco. Su temperamento tranquilo y dócil lo convierten en un animal idóneo para todo tipo de actividades hípicas y ecuestres.
El color más abundante dentro de la raza Saya es el tornillo, pero se aceptan todas las capas de pelaje, incluida la negra.
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