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En este artículo, vamos a hablar sobre cómo realizar el esquilado de un caballo. El esquilado es un proceso en el cual se recorta o rasura el pelo del caballo para mantenerlo más cómodo y fresco durante los meses de calor. Hay diferentes tipos de esquilado y en este artículo nos enfocaremos en el esquilado completo.
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Materiales necesarios
Para realizar el esquilado de un caballo, vas a necesitar los siguientes materiales:
- Máquina de esquilado: Existen diferentes tipos de máquinas de esquilado, algunas inalámbricas y otras con batería portátil. Asegúrate de tener la cuchilla siempre afilada y de lubricarla con aceite mientras realizas el esquilado.
- Toma de luz y alargadera: Es importante tener una toma de luz cerca del caballo para trabajar cómodamente. Una alargadera te permitirá moverte sin problemas alrededor del caballo.
- Banqueta: Una banqueta te ayudará a alcanzar zonas más altas del caballo, como la crin, las orejas o el triangulito de la cola.
- Escoba y recogedor: Necesitarás una escoba y un recogedor para limpiar los pelos que caigan al suelo durante el esquilado.
- Cepillo: Antes de comenzar el esquilado, es importante cepillar al caballo para quitarle las virutas y pajas que pueda tener en el pelo.
Proceso de esquilado
Una vez que tengas todos los materiales listos, es hora de comenzar el esquilado. Aquí te dejo algunos consejos:
1. Familiarízate con el caballo
Es importante acercarte al caballo lentamente y permitirle que se acostumbre al ruido de la máquina de esquilado. Una vez que el caballo esté tranquilo y haya aceptado el ruido, podrás comenzar a estirar correctamente el pelo.
2. Comienza por la cara
Siempre es recomendable comenzar por la cara, ya que es una zona que a algunos caballos les molesta. Es mejor que estén menos cansados al principio para poder quitarles el pelo de la cara rápidamente. Asegúrate de dejar todo el maxilar con pelo.
3. Continúa con el resto del cuerpo
A partir de ahí, puedes continuar con el resto del cuerpo del caballo, utilizando la máquina de esquilado y siguiendo el sentido contrario al crecimiento del pelo. Recuerda ir lubricando la cuchilla con el aceite recomendado para que la máquina funcione correctamente.
4. Presta atención a las patas y la cola
Al esquilar las patas, ten cuidado de no cortar ningún tendón o ligamento. Es importante tener en cuenta que el caballo no tiene músculo en esta zona, por lo que debes ser especialmente cuidadoso. Además, puedes utilizar el truco de levantar la mano del caballo para acceder más fácilmente a las zonas de las patas.
En cuanto a la cola, puedes hacerle un «triangulito» típico del esquilado para que quede con una forma estética.
5. Presta atención a la zona de la villa
La zona de la villa es sensible y requiere especial atención al esquilar. Asegúrate de estirar con cuidado y evitar pellizcar la piel del caballo.
6. Termina con la cabeza y las orejas
Para esquilar la cabeza y las orejas, es importante tener cuidado y realizar los movimientos de forma lenta y suave. Si el caballo se pone nervioso, puedes utilizar un inmovilizador para mantenerlo quieto durante el proceso.
7. Limpia y da el toque final
Una vez que hayas terminado de esquilar al caballo, recuerda limpiar el box para quitar los pelos que hayan caído al suelo. También puedes pasarle una esponja con un poco de vinagre para dejar el pelo brillante.
Conclusion
Espero que este artículo te haya proporcionado información útil sobre cómo esquilar a un caballo de forma segura y efectiva. Recuerda siempre tener los materiales adecuados, trabajar con cuidado y prestar atención a las sensibilidades del caballo durante el proceso. Si quieres saber más sobre el mundo de los caballos, no dudes en explorar otros artículos de nuestra web. ¡Hasta la próxima!